Colores cálidos: son colores que atraen el espacio, porque son los primeros que percibe la retina. Ayudan a disminuir los espacios y aumentan el tamaño de los muebles. Son generalmente estimulantes y activos.
Colores fríos: colores que la retina perciba más tarde, alejando el espacio y generando la sensación de mayor amplitud. Son generalmente tranquilos y apaciguan los interiores.
COLORES CÁLIDOS
Rojo: color vital, excitante, provocador. Se debe utilizar con moderación en pequeños detalles. Se puede rebajar la tonalidad con blancos.
Naranja: color energético y estimulante, aunque no tiene el mismo empuje que el rojo. Si exponemos excesivamente este color puede producir nerviosismo y agitación.
Amarillo: color brillante, alegre, cálido a la vez que da fuerza y también ayuda a aportar luminosidad en espacios con poca luz natural.
COLORES FRÍOS
Azul: color fresco que da calma y reposo. Favorece el trabajo y el descanso en habitaciones. En espacios muy iluminados absorbe luz y resta luminosidad.
Verde: color que nos da confort, frescura y serenidad. Se puede utilizar para dar energía a un espacio oscuro. Según la proporción de amarillo o azul podemos hacerlo más cálido o más frío.
Violeta: color que nos da confort, frescura y serenidad. Se puede utilizar para dar energía a un espacio oscuro. Según la proporción de amarillo o azul podemos hacerlo más cálido o más frío.
COLORES NEUTROS
Los colores acromáticos del blanco (colores sombra, marrones, humo...) son colores normalmente de la naturaleza, de la tierra. No son agresivos y suelen aportar tranquilidad. Se utilizan como fondo para resaltar otros elementos (muebles, cuadros...)